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Ficha técnica
Título: Cuba libre |Subtítulo: Vivir y escribir en La Habana | Autora: Yoani Sánchez | Editorial: Debate | Género: Ensayo | ISBN: 9788483069066 | EAN: 9788483069066 | Páginas: 368 | Formato: 15 x 23 cm. | Encuadernación: Tapa blanda con solapas | PVP: 18,90 € | Publicación: Junio de 2010
Biografía
Yoani Sánchez
En Cuba es considerada la espina más aguda del régimen, para la revista Time es una de las cien personas más influyentes del mundo. Yoani Sánchez, la bloguera cubana, quizá la cronista más incisiva y relevante de nuestros días, nos ofrece una mirada de lo que es vivir en el régimen comunista: el hambre, la escasez de todo, el arte de vivir en un Estado ineficaz y represor, la lucha por descifrar las noticias tras las líneas del periódico del partido, la convivencia forzada con la propaganda, el pánico que producen las convocatorias de la policía, la preocupación por los amigos en la cárcel, la nostalgia por los numerosos fugitivos y la desilusión por todos aquellos que han dejado de creer en el futuro. Pero, sobre todo, el temor y la rabia por los sueños perdidos de quienes, como ella, han nacido en Cuba en los años setenta y ochenta y se encuentran encerrados en una utopía que no les pertenece.
Cuba libre rescata el itinerario virtual de la bloguera de "Generación Y" a través del entramado de reveladores textos y fotos. Un libro imprescindible por cómo está escrito y por lo que deja ver de una vida que a la distancia podría despertar equívocos pero que es terrible.
«He vivido fuera de mi país, pero he regresado porque he entendido que para mí la vida no está en otra parte, sino en otra Cuba.» Yoani Sánchez
«Hay jóvenes cubanos enviados especialmente para realizar labor de zapa y prensa neocolonial de la antigua metrópoli española que los premia.» Fidel Castro (comentando las declaraciones de Yoani Sánchez en el prólogo del libro Fidel, Bolivia y algo más)
CARTELES SÍ, PERO SOLO SOBRE PELOTA
Por estos días el país vive una fiebre beisbolera a partir de los últimos partidos correspondientes al play off de la serie nacional. Los industrialistas visten de azul, mientras que el rojo es el color de quienes le van a Santiago de Cuba. En numerosos balcones, puertas y muros se leen carteles como «Industriales campeón» o «Santiago es mucho Santiago». A los militantes del Partido les han sugerido que durante los juegos en el gran estadio Latinoamericano deben evitar que se grite despectivamente la palabra palestinos para referirse a los jugadores del equipo oriental. Mientras que el despliegue policial dentro y alrededor del propio estadio solo es comparable con el ocurrido durante la Cumbre de Países no Alineados en septiembre último.
Hasta yo, que no comparto la pasión beisbolera, veo los partidos transmitidos en la TV y salto cuando anotan los leones industriales. Sin embargo, no dejo de notar que durante estos días la pelota nos sumerge en un sopor irreal y que hasta la aparición de los tolerados carteles es un paréntesis, un permiso temporal, del que no podremos hacer uso para otros temas. Me puedo imaginar qué pasará si una vez concluida la final cuelgo en mi balcón un mínimo papel que diga «Sí al etanol» o «Internet para todos».
4 de abril de 2007
DESDE MI BALCÓN