1. GPS: un aparato cada vez más redundante, ya que los smartphones pueden utilizarse para las mismas funciones, e incluso los coches inteligentes de última generación incorporan sus propios sistemas de navegación.
2. Ereaders: las tabletas táctiles irán desplazándolos, incluso a aquellos lectores que hacen otras cosas además de leer libros electrónicos. Para los que no quieren perder la tinta electrónica, hay tecnologías que permitirán cambiar entre pantalla a color y eInk.
3. Blu-ray: el streaming y la las televisiones de alta definición conectadas a Internet amenazan a un formato que nunca acabó realmente de despegar.
4. Google TV, Apple TV, y demás aparatos que conectan el televisor a Internet: ¿para qué tener un trasto más en el salón, cuando sus funciones se irán incorporando dentro de los televisores? Además, la tecnología WiFi Direct permite que los aparatos se hablen entre sí, por lo que podremos por ejemplo enviar una película desde el PC al televisor sin necesidad de intermediarios.
5. Netbooks: tuvieron su momento de gloria, pero las tabletas táctiles y los ultraportáitles de grandes prestaciones los están arrinconando.
6. Juegos en discos: los servicios online y las descargas desde la Red harán que los juegos abandonen el clásico soporte en discos.
7. Videocámaras de bolsillo: como los GPS, otro ejemplo de gadget redundante. Las mismas cámaras de fotos y los smartphones crecen en memoria y graban en HD, por lo que apartan a las cámaras de una única función.
8. Televisores LCD: aunque sean ahora los más extendidos, la tecnología LED aporta mejor luminosidad y calidad de imagen. Además, reducen el tamaño de las ya ligeras pantallas a sólo unos milímetros de grosor.
9. PCs de escritorio: tal vez sea la predicción más arriesgada, pero las preferencias de los consumidores parecen decantarse por los portátiles y las tablets.
10. Memorias USB: el mencionado WiFi Direct y los sistemas de almacenamiento en la nube harán que transferir archivos a través de un dispositivo USB sea tan desfasado como utilizar un disquete.
Podemos estar de acuerdo o no con el destino augurado a los gadgets incluidos en la lista, pero piense una cosa: ¿qué ha sido de los aparatos o tecnologías que utilizaba con normalidad hace cinco años? (el video, el discman, el portátil de cuatro kilos, el móvil de concha, los disquetes, etc.). Pues eso.
2. Ereaders: las tabletas táctiles irán desplazándolos, incluso a aquellos lectores que hacen otras cosas además de leer libros electrónicos. Para los que no quieren perder la tinta electrónica, hay tecnologías que permitirán cambiar entre pantalla a color y eInk.
3. Blu-ray: el streaming y la las televisiones de alta definición conectadas a Internet amenazan a un formato que nunca acabó realmente de despegar.
4. Google TV, Apple TV, y demás aparatos que conectan el televisor a Internet: ¿para qué tener un trasto más en el salón, cuando sus funciones se irán incorporando dentro de los televisores? Además, la tecnología WiFi Direct permite que los aparatos se hablen entre sí, por lo que podremos por ejemplo enviar una película desde el PC al televisor sin necesidad de intermediarios.
5. Netbooks: tuvieron su momento de gloria, pero las tabletas táctiles y los ultraportáitles de grandes prestaciones los están arrinconando.
6. Juegos en discos: los servicios online y las descargas desde la Red harán que los juegos abandonen el clásico soporte en discos.
7. Videocámaras de bolsillo: como los GPS, otro ejemplo de gadget redundante. Las mismas cámaras de fotos y los smartphones crecen en memoria y graban en HD, por lo que apartan a las cámaras de una única función.
8. Televisores LCD: aunque sean ahora los más extendidos, la tecnología LED aporta mejor luminosidad y calidad de imagen. Además, reducen el tamaño de las ya ligeras pantallas a sólo unos milímetros de grosor.
9. PCs de escritorio: tal vez sea la predicción más arriesgada, pero las preferencias de los consumidores parecen decantarse por los portátiles y las tablets.
10. Memorias USB: el mencionado WiFi Direct y los sistemas de almacenamiento en la nube harán que transferir archivos a través de un dispositivo USB sea tan desfasado como utilizar un disquete.
Podemos estar de acuerdo o no con el destino augurado a los gadgets incluidos en la lista, pero piense una cosa: ¿qué ha sido de los aparatos o tecnologías que utilizaba con normalidad hace cinco años? (el video, el discman, el portátil de cuatro kilos, el móvil de concha, los disquetes, etc.). Pues eso.
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